Ayer, el Sol entro en la constelación de Escorpio. Happy birthday Scorpio! A Escorpio lo representa el águila, y también los arácnidos. Los escorpiones son estratégicos, amantes de los retos, apasionados, de férrea voluntad, sexuales, tienden su “red” para lograr sus objetivos, y tienen la maravillosa capacidad para renovarse en la mitad de sus vidas (así como el águila que los representa, en la mitad de su vida, se esconde en una cueva, crece nuevas plumas, y destroza su pico para crecer uno nuevo). A Escorpio, lo rige Plutón, planeta de las grandes transformaciones, (por no decir de la vida y la muerte), con gran habilidad para reinventarse y para la renovación. Importante mensaje, y lección, en este periodo otoñal.
La luna entro en su fase menguante en Virgo, fenómeno del cual les comenté el lunes. Seguimos con una gran cruz, aspecto que nos trae retos, pero también, un aspecto sumamente positivo, que nos abre caminos. Este aspecto positivo habla de acometer nuestras metas con la pasión de Escorpio, la fe de Piscis, y la sabiduría de Capricornio. Esta es una fe basada en la sabiduría de las lecciones aprendidas que nos trae grandes transformaciones (Neptuno en Piscis en sextil con la conjunción de Plutón y Saturno en Capricornio). Estos no son tiempos de lanzarnos alocadamente hacia las cosas. Mas bien, debemos ser sabios, midiendo los riesgos con la estrategia de Escorpio, pero con pasión y la fe, más bien certeza, que, como el águila, o el ave fénix, renaceremos de nuestra propia destrucción, renovados.
¡Feliz jueves!